La autora del libro que reseñé en mi anterior entrada ha sido tan amable de concederme una entrevista sobre su novela: Las hojas de Julia.
Por supuesto le doy las gracias por su cercanía y su disposición a concederme la entrevista. Hablamos con ella:
1- Lo primero, felicitarte de
nuevo por el gran éxito que está teniendo tu primera novela. Dime, cuando la
publicaste en Amazon, ¿pensabas que iba a tener tanto éxito?
Muchas gracias Nieves. Y gracias
también por darme la oportunidad de ahondar un poco más en Las hojas de Julia.
Ni de lejos. Cuando la publiqué me
dije a mí misma “si llegas a una o dos personas cada mes, será un éxito”. No
tenía ni idea de cómo funcionaba ese mercado, no sabía si mis expectativas eran
demasiado ambiciosas o por el contrario, demasiado bajas.
Tras seis semanas publicada aún no
me puedo creer que casi cada día haya estado entre los veinte ebooks románticos
más vendidos en España. Por lo que estoy viendo implica llegar a más de
quince/veinte lectores a diario.
Cada día más personas se acercan a
mí a través de las redes sociales explicándome cuánto les ha gustado la
historia. De verdad, nunca imaginé que algo así pasara en tan poco tiempo.
2- Una de las cosas que más me
llama la atención es que la protagonista, Julia, se guíe tanto por la
superstición de algo que le dijo una bruja de feria cuando era niña. ¿Piensas
que hay gente que, por muy supersticiosa que sea, dejaría pasar al amor de su
vida por una creencia de ese tipo? Y al mismo tiempo, ¿crees que la persona a
la que están rechazando por esa superstición haría todo lo que hace Will para convencer
a su amado/a de que tiene que estar juntos?
Buena pregunta Nieves. Pienso que
Julia utiliza como excusa esa “profecía” que le contaron siendo niña, para
evitar avanzar en las relaciones. No conozco a nadie que no haya sentido
vértigo cuando su nueva relación se pone en marcha. Es un periodo de
inestabilidad, inseguridad, desconfianza, en el que los sentimientos crecen muy
rápido, y eso asusta. Creo que Julia, utiliza ese recurso para poner freno a sus
relaciones o incluso para excusarlas cuando no funcionan bien. Bajo mi punto de
vista es una forma de actuar inmadura, pero a ella le produce seguridad, y a
eso se agarra.
Imagino que cuando tienes un buen
trabajo, estás satisfecha con lo que haces a diario y eres bien valorada por
tus compañeros y jefes, daría mucho miedo meterte en una relación que podría no
acabar bien y fastidiarlo todo. Ese aspecto sí me parece maduro.
¿Si creo que alguien movería cielo
y tierra para conquistar a su amor? Sí. Tan rotundo y sencillo como esas dos letras: sí. Cuando el amor mueve
todo tu ser, harías lo que fuera por estar junto a la otra persona.
Es cierto que en la vida real las
relaciones son muy distintas entre sí, pero cuando hay verdadero amor, darías
un riñón a esa persona, viajarías cinco mil kilómetros por estar junto a ella,
te sentarías en su portal toda la noche hasta que volviera a hablarte...
3- El cuadro con el que empieza
la historia de amor de Julia y Will, Bailarinas, ¿lo elegiste por algo
en especial? ¿Representa algo para ti? (Más allá de lo bello que es. No lo
conocía hasta que leí tu novela, y es muy bonito).
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Uno de los cuadros de la serie Bailarinas, de Degas. |
Es cierto, es un cuadro increíble.
Elegí ese porque me encanta. Descubrí a Degas en el Museo de Orsay un verano. La
serie Bailarinas me recuerda a mi
infancia (estuve matriculada en gimnasia rítmica varios años). Hace revivir en
mí la emoción antes de salir al escenario, el cómo apretaba la ropa, el pelo
tirante, los nervios de nuestra maestra...
Soy de las que compra el libro
oficial en la tienda de los museos, y si vieras cómo tengo el de Orsay
pensarías que debe tener al menos ¡cuarenta años!
Ese museo es impactante, desde el
propio edificio y la historia que hay detrás de él, hasta todas y cada una de
las obras que expone.
4- Algo que siempre me gustaría
preguntar a los autores es si cuando empezáis a escribir la novela, tenéis
pensado ya cómo queréis que acabe, o si lo vais decidiendo sobre la marcha. En
tu caso, ¿sabías desde el principio cómo querías que acabase la historia?
Sí, me gusta tenerlo ordenado.
Tanto en la cabeza como en papel: tengo un par de cuadernos en donde anoto la
idea inicial (una chispa que surge ante el más mínimo acontecimiento) y el
detalle y desarrollo de la trama. Anoto incluso cuántas páginas quiero que
tenga cada capítulo y cosas como cómo
será la personalidad de los personajes.
Pero es cierto, y lo comentaba
hace poco en mi blog, que cuando me siento a escribir, a veces son mis dedos,
guiados por el subconsciente, los que describen algo nuevo, algo que nunca
pensé “despierta”. Esa es una parte super emocionante de escribir: sé qué va a
ocurrir, pero a veces pasan cosas inesperadas, que otorgarán a la historia de
más riqueza y profundidad.
En uno de mis cuadernos tengo
anotadas una decena de historias más, así que cuando termine la que estoy
escribiendo tocará dejar que una de esas se meta en mi cabeza.
5- Otra cosa que me fascina es
que, aun siendo el género que es, y siendo difícil crear una obra original en
literatura romántica, los personajes principales no se me parecen a ningún otro
de otras novelas del estilo. Así como Cindy o Nora sí me pueden recordar a
otros personajes, Will y Julia en absoluto. ¿Les has otorgado características
de gente de tu entorno, o es todo ficción?
Supongo que la mayoría de
“imaginadores de historias” estarían de acuerdo conmigo: creo que en cada
página hay un poco de nosotros mismos. No significa que Las hojas de Julia sea
una parte de mi vida, claro que no, pero a medida que pasa el tiempo, voy
encontrando ciertas similitudes que al principio no vi.
Por ejemplo: hace unos días,
ordenando unas cajas viejas, encontré una carpeta que utilizaba para ir a la
Facultad. En esa carpeta, yo había colocado un dibujo propio de una mariposa
amarilla y azul. No recordaba haberla puesto allí, pero seguro que en mi
cabeza, quedaban los restos de la mariposa y los reflejé en la historia de
Julia y Will.
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Mariposa de María Jeunet |
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En cualquier personaje encuentro
rasgos de mí misma, de una amiga, de una historia que leí, de una película que
vi... Cualquier personaje es la suma de muchos momentos, sentimientos,
lecturas, experiencias... Es la vida.
6- Ahora una pregunta más
formal, que también me gustaría poder preguntarle a los escritores. ¿Por qué
narrador en primera persona? ¿Cuál crees que es el criterio que elige un
escritor para narrar en primera o tercera persona? ¿Te gustaría escribir en
tercera persona, o todas tus novelas serán en primera?
Cuando empecé a escribir Las hojas
de Julia, leí sobre el tipo de narrador que podía emplear. No acababa de
gustarme la idea del narrador omnisciente, (pensé que sería una forma de guiar
al lector un poco falsa), así que opté por la primera persona. Quería que Julia
nos contara de forma personal qué le pasaba por la cabeza en cada momento.
Aunque... No pude resistirme y en
varias ocasiones utilicé la tercera persona.
Ahora estoy escribiendo la
historia de Nora: empezó en primera persona, pero ha dado un giro y tenemos a
un narrador que nos cuenta cómo se desarrolla la trama.
Supongo que lo definirá el tipo de
historia que cuente.
7- He de serte sincera. Cuando
Will y Julia vuelven de París, yo apostaba a que no acabarían juntos. ¿Más
gente te lo ha dicho, o soy la única rara que esperaba que acabase con James?
Nadie me lo ha dicho, pero Nieves...
esa era mi primera idea: que Julia tras el viaje a París, se dejará llevar por
sus miedos, hasta los brazos de otro hombre. Pero, finalmente su cabeza (y su
corazón) habría podido más que la superstición, y hubiera rectificado su
decisión.
Opté por no liar la madeja en ese
sentido, me pareció más interesante indagar en cómo se nos rompe el corazón
cuando nos separamos de la persona amada. Lo raro es que en esta historia, no
“la dejan”, es ella la que corta con él, la que se autoimpone ese dolor.
8- Pasando a un plano más
personal. Imagino que esta es tu primera novela publicada, corrígeme si me
equivoco. ¿Tienes más novelas, publicadas o no?
Las hojas de Julia es mi primera novela. Y hasta la fecha la única.
Como sabes, estoy creando la historia de Nora Olsen (la hermana pequeña de
Julia), y como te comentaba un poco antes, tengo en mente unas cuantas más que
necesito desarrollar.
9- Decidiste la
autopublicación. ¿Has intentando antes mandar el libro a editoriales físicas, o
este ha sido tu primer paso? Si la respuesta es que ha sido tu primer paso,
¿tienes en mente mandarlo a otras editoriales, o prefieres seguir con la
autopublicación?
Terminé el libro el Junio de 2013.
No tenía ni idea de cómo funcionaba este mercado, ni el editorial tradicional
ni el tema de la autoedición/autopublicación.
Tras leer experiencias de otros
autores, opté por imprimir dos copias, encuadernarlas en espiral, ponerlas
“bonitas” y las envié a dos editoriales de la misma casa.
Una de ellas respondió rápido y
amablemente, que no estaban interesados. Me hizo mucha ilusión porque había
leído que lo habitual es que no contestaran. Y la otra, casi al mismo tiempo
dijo que lo estudiaría. Imagínate, eso sí que me emocionó y me extrañó. Pero
pasados un par de meses, de nuevo muy amables, me comentaron que no podría ser.
Agradecida por su seriedad opté por los agentes literarios.
Elaboré una pequeña lista y
contacté con tres. Dos de ellos fueron muy rápidos en contestar: “no acogemos a
más escritores” dijeron. Y el tercero aún está por contestar...
Ante ese panorama, me interesé por
la autoedición/autopublicación.
Y resumiendo: si en Junio de 2013
hubiera sabido cómo funcionaban las cosas en uno y otro mundo, te aseguro que
habría optado por la autopublicación de entrada. Hoy por hoy me parece mucho
mejor tener el control de ventas, el control de la edición y el control de la
publicidad.
Pero soy cauta, y no puedo
asegurar que si una editorial llamara a mi puerta algún día la rechazaría. Supongo
que toda decisión depende del momento vital de cada uno. Hoy por hoy me encanta
poder disfrutar de esas pequeñas decisiones, pero si en un futuro mi vida es
más compleja, quizá me gustaría tener a alguien detrás de mí para solucionar
esos temas.
De momento, mi idea es seguir con
la autoedición/autopublicación. Mañana ya se verá.
10- Esta pregunta es más para
los posibles lectores que tengan en mente autopublicar su libro. ¿Les
aconsejarías este método? ¿Qué beneficios aporta (tanto monetarios, como a
nivel personal)?
Como he dicho, no sé nada del
funcionamiento del mundo editorial, así que no podría dirigir la decisión de
nadie en este sentido.
Pero sí puedo explicar lo que para
mí son ventajas dentro de la autoedición/autopublicación.
Para empezar: si tu obra no tiene
errores, la has pulido y repulido, y te ves capaz de enseñarla al mundo, no
dependes de que alguien tenga que aprobarla para sacarla a la luz.
Tú decides cada decisión: la
portada, la sinopsis, lo que tú quieres que sepan de ti, los beneficios, el
tipo de edición, su publicidad...
Actualmente tengo publicada Las
hojas de Julia en amazon, pero mi idea es incluirla en otras plataformas.
Los beneficios económicos rondan
el 35% o el 70% (e incluso ayer leí que hay algunas en donde el beneficio es el
100%). En mi caso, supone que por cada euro vendido, me quedo con 35 céntimos.
Tengo entendido que una editorial,
por cada ebook te reembolsa un 25%, y si la venta es el papel el porcentaje
oscila entre el 5-10%. Así que en este aspecto, la autopublicación (aunque en
teoría no tienes tanta visibilidad, ni promoción y por tanto ventas) reporta
más beneficios.
A nivel personal me aporta...
felicidad. Las palabras de ánimo y los elogios de personas que han leído la
obra, son un manjar para mí.
Hace unos días leí: “hasta una
patada en el culo te ayuda a avanzar”, así que cuando lleguen las malas
palabras, las tomaré así: como una buena patada en el culo que me ayudará a
seguir. De todo hay que ver la parte positiva.
11- Aparte de escribir, que
supongo que te aportará beneficios, ¿trabajas en alguna otra cosa?
Sí, tras terminar la carrera me
especialicé en una rama concreta, y creé junto a mi marido una empresa.
Llevamos trabajando en ella siete años. Este año vamos a dar un par de pasos
muy importantes en ella, así que estamos muy ilusionados.
Esta visión emprendedora me ha
ayudado muchísimo para sacar adelante mi primera novela.
A veces pienso que ojalá hubiera
hecho esto desde siempre, pero después soy realista, y la verdad es que la
experiencia vital que tengo a día de hoy hace que las cosas estén saliendo así
de bien.
12- Y hablando de escribir...
¿tienes pensada alguna continuación de la historia de Will y Julia? ¡Porque yo
me he quedado con ganas de más! O aunque no sea una continuación, ¿tienes en
mente alguna otra historia?
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Cuaderno de María Jeunet para sus historias |
Will y Julia ya han tenido su
momento. Creo que es más enriquecedor ahondar en otras historias y otros
personajes. Pero quien sabe... A lo mejor el paso del tiempo crea en mis
sinapsis una nueva trama con ellos dos como protagonistas.
13- Por último, me gustaría
preguntarte si consideras que algún autor o libro te ha influenciado de alguna
manera al escribir esta novela. Y ya de paso, te pregunto si tienes algún
escritor favorito (te preguntaría por libro, pero sé de buena tinta que es
imposible para nosotros, los apasionados lectores, decidir un sólo libro).
¡Toda la razón Nieves! Creo que la
pregunta “¿cuál es tu escritor/libro/canción/película...etc favorita?” ¡Es la más
difícil del mundo!
Hace unos años viajamos en avión,
y el día antes paseando por una librería pensé “me apetece algo corto y feliz”
y encontré “Ojalá fuera cierto” de Marc Levy. La leí durante el vuelo y me hizo
pensar varias cosas: las lecturas de ese estilo nos hacen sonreír, nos hacen
pasar un buen rato.
Coincidió con que en esa época mi
sobrina me dejó varios libros de Moccia (¡¡hasta entonces no sabía ni que
existía!!), y aunque no he vuelto a leer ninguno, también me hicieron pasar
unas horas entretenida, sonriendo y emocionándome.
Podría decir que esos dos autores
(¡¡que nunca habría elegido!!) fueron los que me mostraron un camino distinto.
Suelo leer cosas muy diferentes, pero he de reconocer que sus historias nos
ponen de buen humor. Nos dan esperanza y nos ilusionan.
Así que podría decir que si Las
hojas de Julia es así, en parte fue por la labor “ilusionadora” de esos dos
autores. La de Julia podría haber sido una historia muy distinta (¿conoces la
peli de Woody Allen “Melinda y Melinda”? En ella se hace ver que la misma
historia puede verse con el cristal del humor o de la fatalidad).
Libros y autores que puedo leer
una y otra vez: El guardián entre el centeno (GENIAL), El Aleph de Borges, en
realidad cualquiera de Borges, en esto tiene la bendita culpa mi marido, de
niña leí docenas de veces Drácula, me encantan los rusos, los nórdicos
actuales...
Acabo de leer Doctor Sueño (no
leía nada de S. King desde niña!!) y me ha gustado mucho. Ahora estoy leyendo
Drive, de J. Sallis, y Los renglones torcidos de Dios, de Torcuato Luca de
Tena.