Título: Amor en minúsculas
Autor: Francesc Miralles
Autoconclusivo
Páginas: 214
Editorial: Suma de letras (Penguin Random House)
SINOPSIS (de la editorial)
Cuando Samuel, un solitario profesor de lingüística, se despierta el día de Año Nuevo, está convencido de que el año que empieza solo le traerá verbos pasivos y no demasiados momentos en cursiva, hasta que un visitante inesperado se cuela en su apartamento de Barcelona y se niega a salir. La aparición de Mishima, un gato callejero, se convierte en el catalizador que hace viajar a Samuel desde la comodidad de sus libros favoritos, sus películas extranjeras y su música clásica hasta lugares en los que nunca ha estado (como la casa de al lado) y a conocer a gente que nunca pensaría haber conocido (un vecino con el que no había intercambiado ni una palabra). Pero aún hay más: el gato lo reencontrará de nuevo con una misteriosa mujer de su pasado, Gabriela, a quien no tenía esperanzas de volver a ver.
Una inteligente, divertida y tierna historia que conmoverá al lector y le desvelará que los pequeños detalles son el mayor secreto de la felicidad.
RESEÑA
Esta reseña me va a costar, porque va a ser negativa, y siempre me cuestan. Pero, las cosas como son, no me ha gustado, y me duele que un libro de Francesc Miralles no me guste, porque uno de sus libros fue el que me reenganchó a la lectura después de muchos años. En fin, allá vamos.
El libro trata la historia de Samuel, tal como dice la sinopsis. Samuel está perdido en la vida, ha llegado un punto en que se siente muy solo y no sabe qué hacer ni qué camino seguir. Su día a día se resume en dar clases y volver a su casa, salir a comprar de vez en cuando y escuchar música. Un día, un gato se cuela en su casa y luego decide seguirle al piso de arriba para ver si el dueño es su vecino del ático. No es así, pero a partir de ese momento su vida da un giro de 180º.
Lo que no me ha gustado de esta novela es que, además de ir de más a menos, tiene demasiadas reflexiones filosóficas truculentas y tumultosas que desentona muchísimo con la dinámica de la trama, que es súper sencilla y sin ningún tipo de lío. Cuando vi que el libro tiraba por la filosofía y por entretejer reflexión y filosofía de vida (tipo autoayuda), y que la trama no tenía nada de interesante o misterioso, decayó en picado mi interés por saber qué sería de nuestro protagonista.
El libro es súper cortito, supera por poco las 200 páginas y en realidad se lee muy rápido, pero ya os digo, una vez se ve que la trama no avanza, y que el protagonista le da muchísimas vueltas a todo por lo mismo, se empieza a perder el punto de mira y lo que quieres es acabar cuanto antes para "quitártelo de en medio".
También me ha decepcionado porque el protagonista se centra solo y únicamente en conquistar a una muchacha que reconoce por la calle. En su infancia estaban unidos pero luego se perdieron la pista. Y una vez se cruza con ella por la calle y ya se vuelve loco-acosador y comienza a seguirla y a intentar toparse con ella. Llamadme loca, pero no es un comportamiento que me parezca sano ni natural...
Tiene otra pega más: deja en el aire demasiadas cosas y hay escenas metidas con calzador. Y para seguir con este argumento voy a hacer una zona con spoilers, perdonadme. Pero os aviso con tiempo.
¡¡¡¡ZONA CON SPOILERS!!!!
Vale, como os decía, una de las cosas que no me ha gustado es el planteamiento de algunas escenas. Por ejemplo, se vuelve loquísimo por esta chica de la que se "enamora" nada más cruzarse con ella en un paso de cebra. Y la veterinaria que le está haciendo el chequeo al gato que es maja, agradable y claramente se muestra interesada por él, de repente desaparece de la novela. Una tarde se están tomando un chocolate y hablando tranquilamente, y luego ya no está.
Otra escena sinsentido: una noche que sale, no encuentra a Valdemar, sigue al que se queda 17 minutos en la barra del bar donde suele estar Samuel esperando a su amor de toda la vida y cuando el otro se da cuenta de que le está siguiendo, le dice que le acompañe a un garito, que le explicará por qué lo de los 17 minutos. Y cuando llega, está su alumna más aventajada que parece que liga con él. ¿Hola? Que no, que no tiene sentido ninguno.
FIN DE SPOOOOOOOOOOOOOOILERS.
Es una pena, de verdad, porque tenía esperanzas en que me gustara. Lo veía tan cortito y por lo que había visto y leído, parecía que me podría gustar y enganchar, pero nada... No dejaré de leer a Francesc Miralles, prefiero pensar que ha sido un bache en el camino. Eso sí, no entiendo cómo este libro ha tenido tantísimo éxito y Retrum, que es su mejor libro hasta la fecha, no ha sido traducido a los mismos idiomas que este :S Misterios de la vida.
Pues es una pena que no te haya gustado, las reflexiones filosóficas pueden llegar a hacerse pesadas si no están bien planteadas.
ResponderEliminarSeguro que igualmente volverás con el autor ^^
Besitos!
Lo leí en catalán hace un par de años y me pareció entretenido pero poco más. No me entusiasmó.
ResponderEliminarun beso ;)
Una pena que no te haya gustado u.u. Yo lo leí y no me disgustó, no es un libro de esos que dejan huella, pero me pareció entretenido xdd.
ResponderEliminar¡Un beso enorme y gracias por la reseña!
Las rseñas negativas siempre cuestan más... No era un libro que me llamara la atención y ahora menos.
ResponderEliminarBesotes!!!
A mí la parte filosófica me gustó, jajaja sobre gustos... colores. Besos y a por otro
ResponderEliminarPues tendré que pensármelo porque me atraía pero no me gusta lo negativo que comentas.
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